Controla tus finanzas con tarjetas de crédito corporativas
La gestión de gastos siempre ha sido uno de los aspectos más complejos al administrar una empresa, se trate de una startup o una corporación. Por ello, algunos bancos y fintechs ofrecen tarjetas de crédito empresariales —cada una con costos y condiciones particulares.
Si eres dueño de una PyME, diferenciar entre tus gastos personales y los del negocio puede ser complicado, particularmente si llegas a usar solo tus tarjetas personales. Esto puede prestarse a malas prácticas financieras, contables, fiscales y legales.
El uso de las tarjetas de crédito empresariales formaliza tu operación y puede ahorrarte dinero al clasificar y gestionar tus gastos al tiempo que simplifica tus transacciones.
Pero, ¿qué es una tarjeta de crédito empresarial?
Es una solución flexible al procesar pagos a través de una línea de crédito revolvente equipada con ciertas herramientas de reporteo y control de gastos.
Algo que caracteriza a las opciones de tarjeta de crédito empresariales en México es que se emiten a nombre de una empresa en lugar de a un individuo.
El usuario final suele ser el dueño del mismo negocio y/o un colaborador autorizado, quienes las utilizan para pagar los gastos presupuestados y realizar compras directamente vinculadas a la actividad de la empresa, como suministros o servicios.
A continuación, abordaremos este tema desde el estándar de la industria y cerraremos con una reseña de la tarjeta empresarial que ofrece Tribal, una de las mejores alternativas en México.
Pros y contras de las tarjetas de crédito empresariales
Cada negocio debe considerar diferentes factores, dadas las alternativas de tarjetas de crédito corporativas en el mercado, antes de tomar esta decisión.
Entonces, en esta sección, discutiremos algunos pros y contras que pueden ayudarte a decidir si debes solicitar una.
Pros de algunas de las tarjetas que ofrecen los bancos tradicionales:
Sin embargo, algunos de los contras de ciertas tarjetas de crédito tradicionales son los siguientes:
¿Cómo obtengo una tarjeta de crédito corporativa?
El 17% de las PyMEs utilizan tarjetas de crédito personales para financiar los gastos operativos de sus negocios. Esto es comprensible, ya que las tarjetas corporativas que emiten los bancos tradicionales suelen incluir largos procesos de solicitud.
Es posible que debas proporcionar a los bancos documentación que demuestre que los ingresos y gastos de tu empresa son lo suficientemente altos como para justificar la contratación de una línea de crédito corporativa.
Una vez que tu negocio demuestra tener capacidad de reembolso y solvencia para pagar una línea de crédito revolvente para tu PyME, el banco pasa a solicitar documentación de diversas áreas para analizar tu solicitud de financiamiento.
Esta documentación incluye:
- Contable: los últimos cuatro estados financieros anuales, o los últimos dos si eres cuentahabiente.
- Legal: acta constitutiva y poder notarial del representante de la empresa.
- Fiscal: una constancia de situación fiscal ante el SAT.
Cabe agregar que la solicitud de una línea de crédito corporativa puede llegar a incluir una auditoría financiera, así que hay que estar preparados.
No obstante, tener un puntaje de crédito personal bajo no impide que tu empresa califique para una tarjeta de crédito corporativa. Esto se debe a que estas tarjetas no requieren una garantía personal.
En el caso de que tu empresa tenga mal crédito o solo haya desarrollado un historial crediticio limitado, es posible que tenga más dificultades para adquirir una línea de crédito corporativa.
La tarjeta de crédito corporativa como herramienta financiera
Uno de los beneficios más significativos de la mayoría de opciones de tarjeta de crédito corporativa, es que los colaboradores de una empresa pueden recibir sus propias tarjetas para manejar los gastos comerciales específicos de su trabajo.
Es común que ciertas tarjetas corporativas ofrezcan herramientas de informes de gastos (unas más intuitivas que otras) para facilitar la administración de fondos, ya sea que la empresa desee realizar un seguimiento de los gastos por categoría, monitorear los gastos de los colaboradores o reasignar su presupuesto en tiempo real.
Lo anterior mencionado crea una sinergia, ya que cuando los colaboradores utilizan frecuentemente dichas tarjetas para pagar facturas y gastos, la empresa genera datos para así armar reportes históricos.
Simultáneamente, vas construyendo un historial crediticio y negociar mejores tarifas con los proveedores es más sencillo.
Así, visualizando los gastos, la empresa puede conciliar los pagos a proveedores automáticamente en función de los datos vinculados a cada pago.
Esto permite descubrir tendencias e identificar valores atípicos, lo cual es una parte integral para garantizar el cumplimiento de la política de gastos de una empresa.
Por ejemplo, al comparar el gasto de cierto período con el benchmark de la industria o el gasto histórico promedio de tu empresa, puedes asegurarte de que ningún colaborador te defraude al presentar su informe de gastos "autorizados", y de paso depurar tu cartera de proveedores.
Gracias a que eres capaz de evitar transacciones ambiguas o potencialmente fraudulentas, tu empresa y sus proveedores estarán en sintonía sobre el estado de cuenta.
Debido a esta precisión, podrás pagarles de forma rápida y segura mientras mantienes el control, y no experimentarás un cuello de botella con tu capital de trabajo.
Sin mencionar que a través de ciertas tarjetas de crédito corporativas, las empresas también mejoran su responsabilidad corporativa.
Por ejemplo, la interrupción de la cadena de suministro durante la pandemia significó que las empresas tuvieron que tratar con nuevos proveedores más rápido de lo que permitían los procesos normales de pago, y/o acelerar el pago de las cuentas pendientes con sus proveedores habituales.
Y hacer esto es posible porque estos tipos de tarjetas facilitan el pago de proveedores nuevos o existentes de forma rápida y segura.
Además, al usar constantemente tu tarjeta de crédito corporativa, puedes ganar recompensas como cashback (reembolso de efectivo), tasa de interés preferencial, bonificación sobre anualidades y/o millas de viajero frecuente, lo que liberará algo de presión de tu presupuesto.
Con esta nueva liquidez, podrás realizar inversiones alternativas para agilizar el crecimiento de la operación.
Tratamiento de la deuda generada por la tarjeta de crédito corporativa
Las tarjetas de crédito corporativas (TCC) se emiten a las empresas cuando firman un contrato con la entidad financiera que les aprueba una línea de crédito corporativa, adquiriendo así un pasivo.
Mediante las tarjetas corporativas, los usuarios autorizados pueden disponer de cierta cantidad de dinero de la línea de crédito durante un período determinado para posteriormente reembolsarla.
A pesar de que estas tarjetas son una fuente de financiamiento de relativo fácil acceso para tu empresa, debes tener la certeza de que eres capaz de reponer el balance en un período reducido de tiempo, pues este tipo de crédito genera intereses diarios y otras comisiones por el efectivo que usaste durante cierto lapso.
Lo anterior es importante, pues el historial crediticio de una tarjeta corporativa está vinculado a un RFC y el puntaje crediticio de la empresa se puede ver afectado por los pagos a tiempo o en mora.
Dado que se espera liquidar el pasivo en el ciclo normal de operación de la empresa, se reconocerán como pasivos circulantes los saldos de la cuenta de tarjetas de crédito y, de forma independiente, los gastos financieros que incurra la deuda.
A continuación, veamos un ejemplo de dos registros contables de gastos pagados con tarjetas de crédito corporativas que generan intereses (hay considerar que las tarjetas de crédito causan distintos gastos financieros).
Además, consideramos como proveedor a la institución financiera a la que se le debe, ya que con esta se entabló dicha "deuda":
Los registros contables de un gasto no varían por su forma de pago. La cuenta de gasto se afecta en el momento en que se adquiere un bien o servicio.
En el caso del pago de un crédito moroso sí aumenta la deuda en proporción a los intereses o gastos financieros causados por morosidad.
Esto se reconoce con el aumento en la cuenta de gasto de intereses y la contrapartida del proveedor bancario (porque ya le debes más al banco).
Ahora, si tu empresa llega a tener complicaciones para cumplir con las obligaciones de la deuda, lo recomendable es negociarla con el banco y evitar así que esta se encarezca y afecte tu historial crediticio.
La tarjeta corporativa de Tribal y sus beneficios
Algo que distingue a la tarjeta de crédito corporativa de Tribal es que no requieren que sus prospectos de clientes cuenten con historial de crédito personal o de su empresa, mucho menos un aval.
Esto gracias a que el proceso de suscripción de Tribal se centra en el potencial de crecimiento de una startup a futuro y no solamente en sus antecedentes.
En Tribal las solicitudes para una tarjeta son estudiadas por una Inteligencia Artificial que nos ayuda a tomar una decisión rápida respecto a cada caso en particular. Otorgándole la independencia financiera a tu negocio cuando más la necesite.
Esta flexibilidad hace de las tarjetas corporativas de Tribal una herramienta financiera ideal tanto para startups como para empresas ya establecidas, al permitirles liquidar y controlar los gastos sin complicaciones, incluidos los pagos internacionales sin comisiones y con tipo de cambio real.
Otro diferenciador es el costo. Por ejemplo, según el último reporte de indicadores básicos de créditos a las PyMEs, los bancos que otorgaron las tasas de interés promedio ponderado más bajas en tarjetas de crédito empresarial fueron:
- BBVA Bancomer: 18.0%.
- Santander: 19.1%.
- Banregio: 27.3%.
No obstante, las tarjetas de Tribal tienen una tasa de interés del 0%. Además, no se cobra ninguna tarifa por sus productos o servicios básicos.
Esto evita que tus colaboradores se excedan de tu presupuesto, puedes crearles tarjetas virtuales con distintos permisos sin ningún costo adicional.
Aquellos colaboradores que asignes como administradores podrán establecer límites de crédito de tarjetas a ciertos compañeros y aumentar o disminuir esos límites instantáneamente.
No solo eso, sino que tras crear tarjetas virtuales de un solo uso para períodos de prueba de suscripciones evitarás pagar accidentalmente la mensualidad completa.
Y al emitir tarjetas únicas para cada establecimiento digital, también estarás protegido de cualquier robo de información.
Por último, hay que hablar del intuitivo panel de control de Tribal. Está diseñado con herramientas avanzadas para mantenerte actualizado en tiempo real de los gastos de tu empresa, mediante una visualización general del uso de tus recursos financieros.
Esta información detallada sobre el gasto tanto de proveedores tradicionales como de eCommerce o SaaS (software como un servicio), te brindan una percepción estratégica de tu flujo de efectivo.
Así creas con precisión un presupuesto o reformas tu estructura de capital para tus necesidades de liquidez al corto plazo.